A veces uno trata de arreglarse con lo que tiene o con lo que puede mantener. Ese es nuestro caso. En general el equipo no es óptimo, pero uno trata de encontrar el modo que nos proporcione un servicio adecuado a nuestras expectativas y a nuestro bolsillo, que es lo que en definitiva resuelve lo que dispondremos finalmente.
A medida que usamos las cosas, vamos encontrando defectos e incomodidades que lógicamente procuraremos solucionar de a poco, con los recursos disponibles.
La colocación de amortiguadores fue un paso importante para intentar lograr la estabilidad, basándonos en recomendaciones de muchos rodanteros. Lamentablemente no fue posible probarlo todavía debido a las restricciones de circulación por la pandemia. El próximo paso sería la colocación de un sistema estabilizador tipo Al-Ko, mecánico o electrónico. Que más le podemos pedir al pobre 504? Reforzar la zona del enganche aún más y colocarle suspensión neumática, para poder cargar un buen peso en la bocha inflando los pulmones de la suspensión, según otras importantes recomendaciones proporcionadas por rodanteros con experiencia en esos sistemas. Estas inversiones son paulatinas y nos permiten avanzar de a poco en las mejoras.
Todos son parches que pretenden aumentar la seguridad en la ruta, que es extremadamente importante y merece ser ensayado y evaluado adecuadamente en condiciones controladas de seguridad.
Es conveniente reflexionar que toda modificación de algo aprobado debe ser evaluado por un profesional habilitado, para ser aprobado nuevamente. Habitualmente, como esto no se hace, lo que suceda luego es responsabilidad del usuario. Por eso, cualquier acción realizada con el equipo debe ser analizada y concientizada, para limitar las consecuencias desfavorables.
En nuestro caso se intenta por todos los medios evitar el bamboleo a velocidades normales y de sobrepaso. Es inevitable que se produzca a determinada velocidad y en determinadas condiciones de viento, turbulencia, etc. pero intentamos que sea a una velocidad que nunca alcancemos. Lamentablemente, en las condiciones previas al agregado de los amortiguadores, esa velocidad crítica la alcanzamos a 60km/h en condiciones de turbulencia durante un sobrepaso en segunda con el 504. Sin esa turbulencia la velocidad crítica se producía a 80km/h. Por ese motivo debíamos viajar a 70km/h y no sobrepasar a más de 50km/h a ningún otro vehículo. Qué resultado tendremos ahora con los amortiguadores? Habría que probar en algún sitio seguro. Encontraremos ese sitio o en realidad estaremos poniendo en riesgo nuestra vida y la de los demás donde quiera que vayamos a probar? Tendremos que estar dispuestos a hacernos cargo de las consecuencias ya que el seguro no suele pagar los accidentes provocados voluntariamente y deberemos llevar la carga de la culpa el resto de nuestra vida. La otra es seguir siendo prudentes y estar atentos a todo lo que ocurre. De a poco obtendremos la información cuando suceda algún evento, que esperamos que sea sin consecuencias lamentables.
Inflar bien los neumáticos, revisar suspensión, frenos, sistema de enganche, que no haya juego en la dirección. Si la dirección tiene juego, en caso de que se produzca bamboleo, no se podrá detener sujetando firmemente el volante y es probable que se pierda el control del vehículo.
Hay muchas mejoras y agregados que pueden realizarse en un vehículo antiguo, pero es mucho más difícil adaptar uno más nuevo de menos de 15 años. Principalmente por la elecrtónica y los sensores que poseen.
Para rodantear con seguridad puede convenir elegir un vehículo antiguo, pero que pueda llevar adecuadamente una CR con freno, soportando un 10% del peso en el enganche, y que además pueda soportar la instalación eléctrica que es necesario agregarle para alimentar las luces reglamentarias y el freno. Y si se pretende transitar por zonas montañosas o con pendientes moderadas, se debe contar con un buen torque inicial que permita arrancar de cero en una subida sin quemar el embrague y que el motor pueda frenar en las bajadas para no malograr los frenos. Sino, habrá que conformarse con los caminos de llanura, abundantes en nuestro país, especialmente para los amantes de las playas y lagunas.
Con esta última reflexión, inicio la despedida del grupo de los "Autitos Tractores" para ingresar en el grupo de las "Camio", que pasa a ser una evolución importante del equipo. Una nueva experiencia nos aguarda para la próxima temporada. Hace falta preparar el vehículo, colocar un enganche adecuado, la instalación eléctrica adicional, cerramiento de la caja para preservar el equipaje, resolver los espejos laterales, y quien sabe lo que se nos irá presentando.